Desde hace varios años, se nos ha advertido a los padres tener cuidado con el peso de la mochila escolar de nuestros hijos, principalmente porque ésta podría ocasionar lesiones en la espalda de los niños.
Se han realizado estudios sobre el peso máximo que deben llevar los niños en la espalda, así como recomendaciones para proteger la espalda de los niños, como reducir el contenido de la mochila y ajustar los tirantes para usarla adecuadamente.
Pero en los últimos años, algunas investigaciones han encontrado que hay otra cosa que está afectando enormemente la postura de los niños: el uso de los móviles y tablets.
Hace algunos años, este tipo de problemas se relacionaba con el uso del ordenador, aunque los efectos en cuello y espalda del uso del móvil no son noticia nueva. Algunos especialistas han explicado cómo estos alteran nuestra postura, pues usamos el móvil prácticamente todo el día, todos los días.
El problema, es que con la presencia de estos dispositivos en la mayoría de los hogares, y la facilidad de desplazamiento que tienen en comparación con el ordenador, niños y adolescentes también se han comenzado a ver afectados por los problemas de postura y dolores de espalda que esto puede ocasionar.
Dolor de espalda a causa del móvil, desde los 11 años
De acuerdo con un estudio realizado en Dinamarca, el dolor de espalda en los niños está directamente relacionado con el uso de las pantallas. Cuanto más tiempo pasan los niños frente a una pantalla, mayor es el riesgo de desarrollar dolor de cuello o espalda desde los 11 o 12 años.
Sin embargo, hay que aclarar que los datos con los que se realizó esta investigación no son muy recientes y son de una época en la que no era tan común que los niños tuvieran teléfonos inteligentes, por lo que los autores de este estudio en particular señalan que actualmente es probable que pasen aún más tiempo frente a una pantalla.
Otro metaanálisis más reciente, realizado en 2023 con datos de hasta un año antes, señala que hay una correlación positiva entre el tiempo diario frente al ordenador, al móvil y al televisor con el riesgo de lumbalgia o dolor de espalda entre los adolescentes.
Revisando un estudio de este año realizado en Colombia por investigadores colombianos y españoles, encontramos que sus resultados respaldan los de éstos y otros estudios anteriores. De acuerdo con sus resultados, los adolescentes de entre 10 y 18 años que mostraban mayor dependencia al móvil fueron quienes más reportaban dolor de espalda y cuello. Esta diferencia fue más notoria en las mujeres y en los adolescentes mayores de 15 años.
Qué podemos hacer como padres
La respuesta es simple: limitar o reducir el uso del móvil y otros tipos de pantalla en niños y adolescentes. Las recomendaciones más recientes de la Asociación Española de Pediatría señañan que el máximo tiempo de uso recomendable para niños de 7 a 12 años es de una hora diaria, incluyendo el período escolar, mientras que para los adolescentes de 13 a 16 años se recomienda un uso máximo de pantallas de dos horas diarias, también incluyendo el período escolar
Pero hay que recordar que no basta con esto, pues incluso poco tiempo puede tener estos efectos negativos, como lo mencionan algunos de los estudios que hemos compartido.
Como padres, somos los responsables de establecer límites que sean saludables para nuestros hijos. Y aunque podemos poner reglas en casa para el uso de dispositivos electrónicos, también es clave que nosotros mismos pongamos ejemplo - después de todo, no estamos exentos de sufrir los efectos negativos en nuestra postura a causa del móvil.
Por otro lado, reconocemos que habrá ocasiones en los que el uso de pantallas es inevitable. Hoy en día muchos de los recursos educativos que se usan en el colegio son en formato digital, por lo que además de reducir el tiempo de pantalla, habremos de tomar otras medidas. Y si decidimos que es momento de darle un móvil a nuestros hijos, es importante pactar normas sobre su uso.
El doctor Gregory Hahn, director de la división de cirugía ortopédica del hospital infantil John Hopkins, señala que debemos asegurarnos que nuestros hijos tomen descansos frecuentes y adopten una postura saludable si tienen que usar el móvil: "Sugiero sentarse en la mesa de la cocina o en un escritorio para que la silla les brinde apoyo para la espalda y, si es posible, colocar la pantalla a la altura de los ojos para que el niño mire al frente en lugar de hacia abajo".
De acuerdo con el estudio de Dinamarca, aumentar la actividad física es una de las maneras en las que se pueden contrarrestar los efectos negativos del uso del móvil, ya que ayuda a prevenir el dolor de espalda en los adolescentes.
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