
Enseñar un segundo idioma a los niños es algo que aporta muchos beneficios para ellos y les abre la puerta a miles de recursos y oportunidades, especialmente cuando ese segundo idioma es el inglés.
Ya hemos hablado en otras ocasiones de algunos de los recursos típicos para que los niños aprendan inglés, como los libros y cuadernos de actividades, pero está comprobado que la inmersión es una de las cosas más efectivas para aprender un idioma. Y la manera más simple de hacer esto, es complementar el aprendizaje viendo y escuchando contenido en inglés.
De acuerdo con la inteligencia artificial, estas son las mejores series y películas para ayudar a los niños a aprender inglés, recomendadas por edades.
Para niños de tres a seis años
Para los más peques de casa, lo más recomendable son las series con diálogos y frases cortas, que incluyan vocabulario cotidiano y cuyos capítulos sean cortos.
Barrio Sésamo. La reconocida serie de animación enseña diversos aprendizajes básicos a los niños con temas nuevos en cada episodio, así como importantes valores.
Las pistas de Blue. Además de introducir nuevas palabras, este programa estimula la comprensión haciendo preguntas pausadas y dando tiempo a que los niños puedan responder, ayudándoles a practicar su inglés.
Dora la exploradora. Esta serie bilingüe puede ser vista tanto en inglés o en español, pues en cada capítulo Dora utiliza frecuentemente expresiones o palabras que combinan ambos idiomas, de manera que los niños puedan comprenderlas e ir sumándolas a su vocabulario.
Bluey. La popular serie australiana es ideal para el aprendizaje del idioma inglés, pues además de tener capítulos muy cortos narra situaciones cotidianas de una familia, enseñando así vocabulario del día a día.
Para niños de seis a nueve años
A partir de los seis años los niños disfrutarán de entretenimiento más largo y profundo, por lo que podemos comenzar a incluir algunas películas, y si éstas contienen canciones, mejor. Idealmente, seleccionaremos aquellas que contengan diálogos simples e historias fáciles de seguir.
Buscando a Nemo. Usa un inglés natural y comprensible, con una mezcla equilibrada entre frases cortas y diálogos más expresivos que tratan de temas como la familia y las emociones.
Toy Story. Toda la saga es recomendable, pero especialmente las primeras dos películas, ya que incluyen frases y situaciones cotidianas con vocabulario sobre objetos comunes, amistad, reglas, juegos y conflictos.
Monstruos S.A. Esta divertida película contiene diálogos llenos de expresiones útiles, humor comprensible y situaciones que ayudan a deducir vocabulario.
Vaiana/Moana. Además de tener diálogos en inglés claro y con muchas expresiones del día a día, sus canciones ayudan a retener el vocabulario aprendido a través de la repetición.
Para niños de 10 años en adelante
Para los mayores continuaremos con series y películas que incluyan vocabulario cotidiano, pero también podemos incorporar ya historias más profundas o con frases y expresiones más complejas que ayuden a continuar ampliando su vocabulario, como historias de aventuras o fantasía.
Harry Potter. Las primeras tres películas son ideales, ya que aportan vocabulario sencillo y pronunciación clara, y su contexto fantástico ayuda a la adquisición de palabras nuevas y diferentes.
The Sound of Music (Sonrisas y lágrimas). Este clásico del cine introduce a los niños a un vocabulario mucho más amplio pero fácil de aprender gracias a sus muchas canciones, vocabulario repetido e inglés bien pronunciado.
The Parent Trap (Tú a Londres y yo a California). Además de tener vocabulario cotidiano y realista sobre familia, relaciones y vida diaria, esta película contiene lenguaje coloquial y expresiones emocionales.
Wonder. Las conversaciones en casa, en clase y entre amigos usan frases comunes y útiles del inglés, así como expresiones emocionales y sociales que realmente se usan en contextos familiares y escolares. Además, al estar contada desde el punto de vista de varios personajes los niños conocerán diferentes formas de narrar en inglés.
Foto de portada | Ketut Subiyanto en Pexels